Mostrando entradas con la etiqueta Italia. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Italia. Mostrar todas las entradas

05 mayo 2022

Fama fugaz del frenético doctor y su frustración posterior

Al Doctor K le sentó fatal que ya no le llamasen como tertuliano para hablar del covid por televisión. Le había costado coger el gustillo a la cosa, pero ahora preparaba sus intervenciones, como un mago el conejo de su chistera, decidido a asombrar con sus ocurrencias, no siempre atinadas, a los habitualmente mediocres  interlocutores que le acompañaban en la mesa; a los idiotas que lo estaban viendo por la pantalla y a los memos que hacían memes a su costa, tras alabarlo o insultarlo, en las redes sociales. Con la última bomba informativa todo había pasado. Estaba a la intemperie y su fama se había esfumado porque la actualidad se había ido a velocidad de misil, y sin fecha de vuelta, hacia la guerra de Ucrania. 

Era orgulloso y soberbio. Se reconocía arrogante y prepotente. Llegado a un punto tan alto, no se iba a rebajar fácilmente a ser de nuevo un divulgador científico de medio pelo que ni siquiera era profesor titular de la universidad en la que enseñaba. Tenía que haber una posibilidad para seguir en la cresta de la ola y no recaer en la purria de los seres anónimos.

Barajaba un abanico de posibilidades. Podría entrar en un laboratorio de bioseguridad y llevarse prestada alguna cepa patógena para luego esparcirla alegremente en el lugar adecuado. No, no era tan iluso o malvado como para creer que podría acceder a las cepas letales que se conservaban en laboratorios hipervigilados de nivel 4 (RG4) que poseían las grandes potencias en parajes secretos. Por otro lado, recurrir a las cepas comunes de la gripe humana, de la gripe aviar o de la porcina no iba a atraer sobre él la atención que buscaba. Les faltaba el morbo que se requiere para asustar y magnetizar a la chusma. 

Descartado lo de las cepas, había que pensar en otras opciones para garantizarse el famoseo. No se veía haciendo el teleidiota en una isla desierta junto a gañanes descerebrados de aire macarra y  chonis horteras a tiempo completo. No, tampoco era lo suyo mezclar mejunjes varios para que un tribunal de estirados cocinillas le diera el visto bueno para poder pasar a la siguiente fase. Menos se veía como un monologuista graciosete, de aire espabilado y displicencia adolescente,  autoparódico llegado el caso, pero muy orgulloso de ser cínico y agudo. Lo de ser streamer, youtuber, influencer y todas esas cositas modernas terminadas en "er", le aburría muchísimo, ya que no quería esclavizar su tiempo y su vida a una pantalla, haciendo cabriolas para disfrute de un montón de paniaguados vampiros del talento ajeno. Era tarde para el fútbol y no siendo jugador, árbitro o entrenador de campanillas, no lo llamarían para comentar partidos, aunque sin duda lo haría mejor que esos tartamudeantes tuercebotas.

La cosa se había puesto complicada y decidió llamar a su amigo Fiz Arou, el afamado y ocurrente detective de la siempre deslumbrante Kaskarilleira.

  •  Neno, se me ha acabado el chollo de tertuliano. ¿Se te ocurre algo que palíe mi desventura?
  • Ah, con que al final te iba la movida y mira que te resistías al principio.
  • Va, pero dime algo que se te ocurra para seguir marcando territorio. Ahórrate las chorradas que ahora molan, ninguna me convence.
  • Hay una cosa que aunque esté en la onda...
  • Ya te he dicho que no quiero nada de eso.
  • ¿Y montar un partido populista, doc? 
  • ¿Qué me dices, chorvo?
  • Claro, crear un partido populista te haría estar de moda y petarías un montón. Podrías llamarlo Partido Patriótico Despótico, porque el rollo patrio engancha a las masas, o quizás podrías llamarlo PA.P.AYA. (Partido Populista AntiYanqui), sonaría ecologista y le podías pedir a Putin que lo financiase. No le parecería mal tener algún apoyo en Occidente ahora que está tan demonizado y nos machacan con documentales diciéndonos que es muy malote.
  • Como si no lo supiéramos desde hace más de 20 años. Ahora dime, ¿crees que hay caladero de votos con ese partido?
  • Con el PAPAYA, seguro. Es cuestión de encontrar un lema adecuado tipo "todo lo imperialista y malsano es culpa de los americanos". Nada une tanto como un enemigo fácil y distinguible al que echarle la culpa para dejar de sentirte que eres un capullo, sobre todo si eres de los que en las películas de vaqueros siempre vas con los indios. Los plastas sectarios de uno y otro lado se apuntarían encantados, necesitan una figura de autoridad que los amamante y ampare.
  • Un padre castrante que se dice.
  • O una madre amamantadora, doc, como la Luperca de Rómulo y Remo. Eso es lo que les va a esos julais. ¿Te atreves con el asunto?
  • No, no me veo como amamantador o castrador.
  • No, tú lo que tienes que hacer es montar el tinglado y ya encontrarán ellos a su pastor, a su duce,  a su caudillo, a su fuhrer, a su conducător, a su gran líder, a su estimado líder,  a su brillante camarada...
  • Mira que eres chapas, esa es una liada del quince y suena muy religioso. Pensaré en otra cosa. Abur, Fiz
  • Cuídate, boquerón.  La próxima vez te cobraré la sesión, que no me gusta pencar gratis.
 (Capítulo 65 de Kaskarilleira Existencial. Aquí están sus otras historias)

25 marzo 2021

El duende decano y un pontífice romano


El viejo papa estaba inquieto, las pruebas clandestinas de ADN y del Carbono14 eran concluyentes: los restos guardados en la tumba de Santiago Apóstol  eran de una mujer. 

  • ¿No son del hippie?
  • ¿El hippie, Santo Padre? -su secretario estaba perplejo.
  • Prisciliano, el hereje ese. Con su secta, sus repugnantes orgías y la igualdad de sexos. Toda esa porquería obscena.
  • No, Santo Padre, los restos encontrados y expuestos son de una mujer joven.
  • Eso no quiere decir que originalmente no fueran de Santiago. Fue un hecho milagroso encontrarlos después de nueve siglos y luego tras esconderlos de los piratas en el XVI que volvieran a aparecer en el XIX.

Cuando se marchó el secretario, no me pude contener. 

  • Venga, papa, que son muchos años con esas paparruchas grotescas.
  • Maldito duende, ¿cuántas veces te he dicho que no vengas a mis audiencias privadas? Vuelve a tu inmundo escondrijo y no te metas en asuntos de los mayores. 
  • ¿Acaso de los mayores embusteros, Santo padre?
No, no el papa que se precipitó hacia mí, no era el  venerable santurrón de las noticias y los reportajes. El viejo extrajo su furia escondida, se levantó de su majestuoso asiento y todo blanco,  se me lanzó blandiendo el primer báculo que encontró a su paso.
Yo estaba en el alto de la estantería y no temía ser agredido de forma inmediata. Asumí un gesto de cierta chulería saludándole con mi sombrero de copa e hice una mínima genuflexión para evitar que se arrugase mi preciado traje verde.
  • Señor, le recuerdo que soy el Duende Decano del Vaticano y no contribuiría a su buena imagen actual o a su posterior consagración postmortem, que le hiciera daño a un alto funcionario con más de cien quinquenios a sus espaldas.
El viejo papa se paró en seco, echó las manos a la espalda y cambió su expresión furibunda por una sonrisa maliciosa. 
  • Si eres funcionario puedo sancionarte con una falta muy grave por espiar los secretos vaticanos. Ya sabes que con esas cosas somos muy rígidos en esta institución.
  •  Lo sé, pero usted y la curia saldrían perdiendo y nunca conocerían mi nueva poción mágica.
  • ¿Me vas a contar uno de tus habituales embustes? Suelta de una vez tu nueva sandez, no me hagas perder todo el santo día
  • Su santidad, sus días deberían ser siempre santos. - pícaro, le guiñe un ojo
  • Empieza, sabandija.
  • ¿Recuerda aquel personaje de Molière llamado Tartufo? Pues nuestra legión de duendes ha elaborado una receta a base de tartufos blancos, o sea de trufas blancas del Piamonte, más otros productos inconfesables a un papa, que podría conseguir que la gente modifique sus creencias y su comportamiento
  • ¿En nuestro beneficio? ¿Los hará más católicos? -Me preguntó ansioso
  • No, los hará más hipócritas que si lo piensa bien, Santo Padre, viene a ser parecido. Serán más mojigatos y santurrones en lo suyo. Abandonarán el hedonismo y el puro placer les hará sentirse culpables. Serán más abusivos y controladores. Convertirán sus ideas en una farsa devota y vigilaran sin descanso las ideas ajenas. Se volverán rígidos, victimistas y disciplinados. Más amigos de la doctrina que del diálogo. Más amigos de la consigna que del libre pensamiento.
  • Su poción promete, decano - me dijo con su primera sonrisa - Tiene muy buena pinta, nos libraría de la plaga relativista, atea y lujuriosa. No exigiría una Inquisición si cada uno llevase la suya dentro.
 No dije nada. Me limité a disimular mi repugnancia mirando hacia abajo, mientras le dedicaba al papa una nueva reverencia con el sombrero en la mano.
  • Muy bien, duende, hoy  estoy muy satisfecho contigo. Si esto sale adelante, los tuyos tendrán unas prebendas  inimaginables. Podréis comer y beber todo lo que queráis, guardar los tesoros más valiosos e incluso se os permitirá hacer alguna travesura a las gentes de forma discreta, como en los viejos tiempos.
  • ¿Y  respecto al sexo?  
  • ¿Qué pasa con el sexo?
  • Los duendes necesitamos mucho sexo.
  • Maldito seas, decano. No me metas en inmoralidades- me miro en silencio, se rascó la cabeza debajo del gorro papal y soltó un gruñido- De acuerdo.
  • Ok pues terminamos.
  • No, querido duende, antes debes decirme como  distribuiremos ese bebedizo entre la población.
  • En España hay una leyenda sobre como en el franquismo se echaba bromuro en la comida de cuarteles, colegios, prisiones etc. para aplacar la excitación sexual  de los internos. Eso me ha dado una idea, se podría llegar a un acuerdo secreto con las multinacionales de la alimentación para distribuir la poción entre los ingredientes de sus productos elaborados. Hay tantos que nadie se daría cuenta. Llevaría tiempo, pero en unos cuantos años tendríamos tartufos en cada esquina.
El papa se fue chasqueando los dedos y agitando los pies,  mientras cantaba aquella vieja canción de Roger Miller que aquí te ofrezco. Yo, asqueado de mi propia hipocresía, estuve vomitando un rato.

30 marzo 2016

Escritor de fortuna, escritor de mierda

 Pevertino le debía su fortuna a aquella bala que no quiso matarle y cuyo casquillo llevaba en un collar colgado al cuello.

 Aquella bala que agarraba con fuerza cada vez que temía convertirse en la gimoteante escoria que había sido antes de oír su tenue silbido rozándole la oreja. 

 El silbido de la  bala que le salvó la vida y le hizo escritor de fortuna.

 Escritor de fortuna, le gustaba el título. Como los viejos capitanes de fortuna, los condottieri, que guerreaban en los principados italianos soñando con riquezas infinitas o con acabar gobernando un pequeño territorio inconquistable.

 Ahora gobernaba un pequeño territorio conquistado. Una ínsula barataria donde dictaba las normas y era supremo hacedor. Un tipo implacable subido al púlpito de su columna semanal para castigar incompetencias, denunciar facinerosos o dar consuelo a los fracasados. Sí, aquella bala le quitó los miedos y le hizo rico, influyente y famoso. 

 No era un iluso, era rico, influyente y famoso pero también un novelista de mierda. Puro baratillo para atraer al populacho mal alimentado. Burdos folletines del tres al cuarto en decorados históricos de cartón piedra. Una cuadra de personajes previsibles y simplones: el héroe canalla y valiente, la vampiresa atractiva y misteriosa, el amigo cobarde y gracioso, el seboso y mezquino villano, la inocente chica y de vez en cuando alguna de esas figuras solemnes que aburren los libros de historia.

 Nunca pasaría a los libros de historia; lo suyo era basura; pero gracias a ello ahora estaba subido en el dorado trono de la opinión pública dictando sentencias morales en vez de arrastrarse comiendo barro por las trincheras de corresponsal de guerra y llevando los huevos de pajarita. 
Hasta le habían nombrado miembro de la Academia. 
Quizás para airear  el santuario de momias. 
Quizás para mejorar la biodiversidad entre el rebaño de acémilas. 
Quizás por tener cerca a un macho de poderosos puños que defendiese la entrada al Parnaso de la iniquidad de la chusma.

 No, nunca entraría en el Parnaso; porque siendo un macho de poderosos puños haciendo novelas de mierda y dictando sentencias morales que le otorgaban el gobierno de un pequeño territorio conquistado; no tenía la clase de poder que el silbido de la bala que le rozó la oreja le hizo creer. 

 Aquella bala que no quiso matarle, no le otorgó la gloria eterna.

07 diciembre 2009

El show debe seguir, la fábrica no puede parar.



"Casi 39 años después de la clamorosa muerte de Luigi Tenco, el famoso cantante italiano que, a los 29 años, tras verse derrotado en el festival de San Remo, decidió quitarse la vida, un magistrado italiano decidió reabrir el caso. "Molestaremos la paz del pobre Luigi Tenco por amor a la historia de la música", anunció el fiscal Mariano Gagliano, que en el marco de una nueva investigación ordenó que a principios de enero se exhume el cadáver del artista.

El fiscal adelantó que la nueva investigación no aportará novedades espectaculares. Pero, al menos, despejará todas las dudas que siempre rodearon su muerte. Esta, en efecto, fue un hecho trágico que conmovió a los italianos, y que la magistratura, al parecer presionada, quiso cerrar rápido, a las apuradas, porque "el show (en este caso, el Festival, debe seguir)".

Así, se trató de una muerte mal investigada, y archivada de inmediato como suicidio, sobre la cual se tejieron miles de hipótesis y leyendas. Tenco se pegó un tiro de una pistola Walter Ppk calibre 7,65 en la madrugada del 27 de enero de 1967. Su cuerpo fue hallado en el piso de la habitación 219 del lujoso hotel Savoy de San Remo por su mujer del momento, la cantante francesa Dalida (que también se suicidó, en 1987).  

Dalida había cantado junto con Tenco en San Remo Ciao amore Ciao, un tema poco antes excluido de la final por un jurado popular. Esa noche, deprimido, Tenco había rechazado ir a cenar con ella y sus amigos. Se encerró en su cuarto de hotel, donde tomó grapa y Pronox, un calmante. A las 2.10 de la madrugada, la mujer hizo el macabro hallazgo en la habitación del hotel.
A las 2.45, el cadáver fue llevado a la morgue. Y poco más tarde, a las 3.30 de la mañana, fue nuevamente trasladado al cuarto 219 del hotel Savoy, el escenario de los hechos, para que los periodistas pudieran sacarle fotos... Algo considerado hoy no sólo una grotesca puesta en escena.
Al margen de esto, nunca se hizo una autopsia, ni una prueba de parafina, ni tampoco un sumario de reconocimiento del escenario del crimen. Tampoco nadie se explica por qué en las fotos del cadáver se deduce que Tenco se disparó sobre el lado izquierdo del rostro, cuando él no era zurdo.
Lo cierto es que en la habitación se halló una nota manuscrita por Tenco -jamás analizada-, que explicaba el porqué del suicidio:"Hago esto no porque estoy cansado de la vida (todo lo contrario), sino como un acto de protesta en contra del público que manda a la final ´Io tu e le rose´ (otro tema presentado en el festival)... Ciao, Luigi". Esta carta será puesta bajo la lupa de peritos caligráficos. Según sus amigos, Tenco amaba demasiado la vida como para quitársela."

 (ROSSEND DOMENECH - EL PERIODICO - 27/12/2005)
(El caso fue archivado cuando el  fiscal no encontró nada relevante) 
La calle de siempre,
blanca como la sal
El grano que crece,
los campos que se aran.
Mirar cada día
si llueve o hace sol
para saber si mañana
se vive o se muere
y un buen día decir basta y largarse
Ciao amore, ciao amore
ciao amore ciao.
Marcharse lejos
a buscar otro mundo
decir adiós al patio
alejarse soñando
y luego mil calles
grises como el humo
en un mundo de luces
sentirse nadie
saltar cien años en un solo día
de los carros en el campo
a los aviones en el cielo
y no comprender nada
y tener ganas de volver a tu lado
Ciao amore, ciao amore, ciao amore ciao.
No saber hacer nada
en un mundo que sabe todo
y no tener un duro
ni siquiera para volver.
Ciao amore, Ciao amore, ciao amore ciao...




"Dalida murió el 3 de mayo de 1987 como consecuencia de una sobredosis de somníferos, en la soledad de su maravillosa casa de la rue d´Orchampt nº 11 bis, sita en el parisino barrio de Montmartre. Contaba 54 años. Seguía así la senda que también habían seguido sus tres grandes amores: Luigi Tenco (muerto en 1967), Lucien Morisse (primer esposo de Dalida, el cual se suicida en 1970) y Richard Chanfray (fallecido en 1983). Junto a su cuerpo se encontró una nota de despedida: Pardonnez-moi, la vie m'est insupportable (Perdónenme, la vida me es insoportable)." (WIKIPEDIA ESPAÑOL)

31 mayo 2009

Geografía del dolor 1: Nápoles




"Tres mil seiscientos muertos desde que nací (1979). La Camorra ha matado más que la mafia siciliana, más que la ‘Ndrangheta, más que la mafia rusa, más que las familias albanesas, más que el total de los muertos causados por ETA en España y por el IRA en Irlanda, más que las Brigadas Rojas, más que las NAR y más que todos los crímenes de Estado cometidos en Italia. La Camorra ha matado más que nadie. Me viene a la mente una imagen. La del mapa del mundo que aparece con frecuencia en los periódicos. Destaca en algunos números de Le Monde Diplomatique, ese mapa que indica con una llama resplandeciente todos los lugares de la Tierra donde hay un conflicto: Kurdistán, Sudán, Kosovo, Timor Oriental. Pero no hay ni rastro de destellos, no hay dibujado ningún fuego. Esto es el corazón de Europa. Aquí se forja la mayor parte de la economía de la nación. Es necesario que la carne de matadero permanezca empantanada en los barrios de la periferia, reviente en el caos de cemento e inmundicia, en las fábricas clandestinas y en los almacenes de coca. Y que nadie lo mencione, que todo parezca una guerra de bandas, una guerra entre facinerosos"
(GOMORRA- ROBERTO SAVIANO)

05 septiembre 2008

David el Gordo


  • Girolamo, Girolamo que ahora es real. ¡Se ha puesto gordo como una búfala preñada!
  • ¿De que hablas, Michele?
  • Del David. Tanta coña deformándolo con el Photoshop que por fin lo han conseguido: ahora es gordo de verdad.
  • ¿Le has dado a la frasca, Michele? El jefe ya te avisó de que como te volviese a pillar borracho en otra guardia nocturna, te pondría de patitas en la calle.
  • ¡Ven si no me crees, Girolamo!
  • ¡Mamma mia, Michele, que lorzas tiene el cabrón!
_______________________________
  • Sí, señor ministro, lo descubrieron a eso de las cuatro de la mañana. (...) ¿Las cámaras? Es que el David está a oscuras para preservar ...para preservar el mármol de la luz. Sólo una pequeña luz cenital, por eso apagamos las cámaras de noche y claro no se ve nada (...) Lo siento, ministro, siempre se han hecho así las cosas. (...) Aceptado, mañana mismo tendrá firmada mi dimisión, no se preocupe.
_______________________________
  • Dios santo, ministro, ésto es peor que la derrota en la Copa del Mundo del 90. Lo que quiero que quede bien claro desde ya, lo más importante, por encima de todo, es que hay que hacer lo posible para que la prensa no se entere. Seríamos el hazmerreir del mundo. ¿Con que cara voy a ir ahora a Washington, a Bruselas, o al G8? El G8, porca miseria, seguro que nos echan y meten a los españoles. Lo estoy viendo. ¡Maldito Zapatero!
  • No creo que Zapatero haya sido el responsable de cebar a nuestro David, Commendatore.
  • Demasiadas ministras, ministro, y ya sabe lo que pienso -en secreto, claro está- de que haya tanta mujer tomando decisiones. Nada bueno puede salir de ahí.
  • Primer ministro, a usted le fue muy bien con el lifting, podríamos hacerle lo mismo a la estatua.
  • Mamma mía, ésto de escoger ministros mediocres para que no me hagan sombra no está dando los resultados esperados. ¡Su estupidez es demasiado notoria!
_______________________________
  • Primer ministro, hemos recibido varios comunicados de organizaciones terroristas que se hacen responsable del repentino engrosamiento del David. El primer comunicado es de "Operarios para Dios" (O.P.D.), una escisión del grupo religioso "al que todos conocen" que tiene como pretensión que se restablezca el Santo Oficio para juzgar a rameras, gays, ateos, chulos y demás izquierdistas que pretenden emponzoñar los nobles ideales religiosos de esta muy santa y noble nación católica. Dicen que sí no se les hace caso, seguirán con su campaña de terrorismo estético y por tanto, las obras de Michelangelo, Botticelli, Leonardo y el resto de herejes pornógrafos tienen los días contados.
  • Deben ser ellos, nadie es lo suficientemente estúpido como para pasar a un grupo tan cavérnicola tan alto secreto del Estado.
  • Espere, Primer Ministro. El otro comunicado es del Ejercito Templario y Secreto de María Magdalena y reivindican el atentado en nombre de todas las mujeres que desde Jesucristo han sido sometidas al machismo eclesiástico usurpador de la personalidad profética y matrimonial de María de Magdala. Dicen que el David es una representación brutal de la dictadura masculina en la sociedad patriarcal.
  • Este ejército no puede ser el autor del latrocinio. Todo el mundo sabe que las mujeres se vuelven "tontolinas" mirando al David.
  • Precisamente de eso va el tercer comunicado. Lo reivindica la Asociación de Turistas Masculinos Afectados por las Comparaciones Odiosas (A.To.Ma. por C.O.). Dicen que están hasta las narices de las ironías que les sueltan sus compañeras cuando ven a otros hombres con mejor físico que el de ellos. Ven al David como personificación de sus males y han decidido darle una lección volviéndolo normal. Siguen diciendo, que no se van a quedar ahí; ahora les toca pringar a metrosexuales, chulitos de playa o piscina,tocadores de guitarra en atardecer de terraza de verano, babosos con descapotable o supermoto, trajeados con tres masters, playboys otoñales y en general todos aquellos transalpinos con pinta de transalpinos o haciendo de transalpinos
  • ¡Rápido, ministro, al refugio secreto!. Mi vida corre serio peligro. Estos, sin duda, son los terroristas. Peligrosos ...¡y con muy mala leche!

24 mayo 2006

Del mañana no hay certeza


Es posible que ese espigado personaje que por el día expone su rotunda anatomía en la Galería de la Academia de Florencia, baje por la noche de su pedestal y haga horas extras paseando su marmórea desnudez por los sueños secretos y furtivos de las más insospechadas matronas.
Es posible que de la marea oriental, en indigesto frenesí contemplativo a 12 obras de arte por minuto, se metamorfosee un individuo, uno sólo, y aparezca en su rostro extranjero, durante breves segundos, la mirada extraña, la sonrisa impúdica y el gesto imprevisible del San Juan Bautista de Leonardo.
Es posible que la ragazza que se viste de gala y se coloca zapatos con tacones de aguja para ir a un sabatino “bottiglione” sienta en la noche tardía como un escalofrío la recorre el cuerpo no por el exceso de grappa sino porque temporalmente ha decidido habitarla el fantasma bello, sofisticado y triste de Giovanna Tornabuoni.
Es posible que “il porcellino” de bronce esté esperando a que la loggia del Mercato Nuovo se vacíe de mercaderes, turistas, emigrantes africanos y barrenderos, para poder mover su hocico, mil veces manoseado y soñar con echarse una carrera hasta la Plaza de la Señoría asustando a los borrachos.
Es posible, en fin, que los viejos muros de la vieja ciudad, en la singular hora en que todo está en silencio, rejuvenezcan recordando los viejos momentos de gloria cuando por las calles resonaba el viejo poema de aquel al que se llamó Il Magnífico :
 
Que bella es la juventud
de la que sin embargo se huye,
quien quiera ser feliz que lo sea;
del mañana no hay certeza.