28 enero 2021

Contra los genios del mal y los vacunados jetas

Estaba estupefacto, los genios del mal habían okupado la torre romana de Kaskarilleira como base para sus tropelías. Allí cada noche, desde la cúpula acristalada e iluminada por la poderosa linterna, el magnate Xoros y el siniestro Gueiss dirigían un ejército de esbirros zombis que vacunaban en la atalaya a los mandamases jetas que saltándose el turno establecido querían recibir cuanto antes la ansiada inyección. 

La cola era inmensa, llegada de todas partes, y se alargaba a través de la estrecha escalera de caracol de 234 escalones. Formaban grupos de quince personas que tras ser vacunadas, bajaban a la rotonda interior esperando que subieran otras quince. Así sucesivamente. Todas estrechamente vigiladas. Todas enmascaradas debajo de sus mascarillas de máxima protección. Todas creyéndose importantes e imprescindibles. Con demasiados argumentos de mierda para justificar su descaro. Abajo, sus chóferes, asistentes y guardaespaldas les esperaban cerca de sus vehículos para llevarlos raudos a sus privilegiados destinos.

Yo, Fiz Arou, sabía la verdad y tenía que hacer algo. Xoros y Gueiss eran individuos maléficos que estaban introduciendo microdrones en el corriente sanguíneo de los incautos gerifaltes para ser manipulados y teledirigidos. No tenía dudas sobre la condición ventajista de estos miserables, pero aunque merecieran pasarlo putas por su desvergüenza, me preocupaba el daño que le podían hacer al resto de la gente siendo vasallos de los genios del mal. No era bueno que esos descerebrados con mando sirvieran a tan peligrosos amos. 

El doctor Krapp con su habitual displicencia, me ofreció una solución."Este es un aerosol con un poderoso agente químico. Si no fueras un rudo detective te diría su composición, pero dada tu natural ignorancia, ¿de qué serviría? Quédate con que lo he llamado N.M.C. Con eso te basta" "No me basta, ¿dígame que significan esas siglas?" "Está bien, capullo, te lo diré. Significan No me Molan las Conspiranoias. ¿Te lo deletreo?" "Vale, déjelo así" "Llevarás una canana como si fueras un revolucionario mexicano y en cada compartimento un espray para usarlo cuando se vayan agotando los otros."  "¿Cuándo empiezo?" "Esta misma noche. Será a partir de las 12 cuando los tipos que ya recibieron la primera dosis, recibirán la segunda y definitiva" "¿Algo más?" "Sí, no la cagues".

Lo que pasó luego lo recuerdo entre brumas. No sé como llegué hasta la explanada de la torre tras liquidar a golpe de flissshhh al grupo de zombis que vigilaban el entorno. Yo era ya una pesadilla en movimiento que azotaba la noche. Al llegar con un aerosol enhiesto en cada mano a la zona donde estaban los asistentes y guardaespaldas, hubo espantada. Los gritos, los motores arrancando, las carreras a campo a través. En pocos minutos volvió la calma y yo me dirigí sin precipitarme a mi destino final. Recuerdo que subí la escalera de caracol con cierta tranquilidad, apartando a unos y a otros. Un alcalde me quiso golpear con su bastón de mando y le di un trompazo poco doloroso. Un obispo con clergyman me lanzó un rosario y lo esquivé sin problemas. Llegué arriba, lancé una patada a la mesa de líquidos y agujas, aparté a cuatro pacientes y esparcí mi matarratas contra media docena de zombis con el éxito previsto. Sabía que los dos genios del mal se habían refugiado en el cuarto del farero e hice el gesto de sacar los dos últimos aerosoles de la canana para abrir la puerta y rematar la faena. Sin embargo, mi brazo no llegó a su destino. Tropezó con el vaso con agua de la mesilla que acabó volcado en el suelo.  El mudo despertador  y el libro de comics fueron testigos de la caída de su compañero de mesa y de mi torpeza. Montando la bronca habitual, pasaba por la calle el camión de la basura. Sentí que me podían recoger con ella.

 (Capítulo 53 de Kaskarilleira Existencial. Aquí están sus otras historias)

15 enero 2021

Cuando un trumpazo no acaba en trompazo

  • He recibido una orden internacional de busca y captura contra usted, señor Fiz Arou. Al parecer las autoridades norteamericanas lo consideran uno de los posibles instigadores del asalto al Capitolio.
  • Eso es absurdo, señor juez, no me he movido de Kaskarilleira desde que empezó el confinamiento. 
  • Dígame la verdad, ¿colabora o ha colaborado con el trumpismo o tiene negocios turbios con el afamado personaje?
  • Señor juez, no vivo en un rancho de Kentucky, en un apartamento en Park Avenue o en una mansión en Beverly Hills. Sobrevivo en un piso destartalado y ruinoso en la calle Ozán, lugar sombrío y con mala fama de mi amada ciudad atlántica.
  • Pero usted es el responsable de haber traído del pasado, ocho neandertales en su contenedor de basura transtemporal. Tenemos su declaración anterior en este documento.
  • Señor juez, yo salvé a aquellos neandertales de la extinción de su raza. Intenté encontrarles una actividad productiva con escaso éxito y ante mi fracaso los entregué a las autoridades. Nunca imaginé que los recluirían de forma indigna en un parque natural. Grave error, siendo nómadas, no se sentían a gusto con las restricciones perimetrales, tanto del parque como de la Covid, y tomaron las de Villadiego.
  • ¿Y cómo fueron desde Villadiego, provincia de Burgos hasta Washington, distrito federal, señor Arou?
  • Lo de Villadiego es una expresión muy antigua de la lengua castellana, señor juez, debería conocerla. Ignoro como se marcharon hasta allende los mares, aunque me lo imagino.
  • ¿Qué se imagina?
  • Pienso que los trumpistas eran los cavernícolas más a mano después de que los nuestros salieron malparados cuando se atrevieron a desconfiar de la españolidad de mis chicos. (Otra vez, y sin querer ser pesado, te recomiendo la entrada de marras
  • Usted manifestó en su declaración anterior, que en el mitin a donde los llevó los llamaron "extranjeros de mierda y perroflautas".
  • Exactamente, señor juez. Para tener tan poca vista recibieron mucha tunda.
  • ¿Y por qué los americanos no fueron tan escrupulosos siendo de la misma ideología?
  • Ya sabe como son ellos para esas cosas, si hay que dar espectáculo fichan a cualquiera que lo garantice. Como promesas europeas para la NBA. 
  • Puede ser. El FBI nos ha informado de que sus neandertales, fueron embarcados en un jet privado por un conocido conspirador norteamericano de extrema derecha, pasaron tres semanas de adaptación en un rancho de Nebraska donde aprendieron tácticas de rodeo, uso del rifle, lazo etc... para finalmente ser enviados a la capital federal formando parte de una de esas aguerridas y patrióticas milicias. Nadie se percibió de su ancestral condición.
  • ¿Le sorprende? No destacaban entre esa gente. Esos pirados ultras hablan de la decadencia de la civilización blanca, pero están contaminados por el mestizaje racial, la libertad sexual y no conciben la vida sin sus aparatitos tecnológicos, su comida vegana o su brunch del mediodía. En tiempos de Hitler acabarían en un campo de concentración por decadentes y pervertidos.
  •  Pues sus neandertales se lo pasaron en grande. Hay vídeos en que aparecen con gorras y botes de beisbol dando golpes a diestro y siniestro. Un delirio. Llevaban cazadoras sin manga, camisetas a colores y pantalones ajustados.
  •  No he visto nada de eso.
  •  Han sido censurados por el Servicio Secreto Americano por temor de que se pensase que eran los Bigfoots y hubiese otra revuelta. Allí la gente es muy crédula y los neandertales les son muy lejanos, prefieren sus monstruos domésticos.
  • ¿Pero si los han detenido tendrán que informar a la opinión pública?
  •  Se han escapado. Se cree que han sido reclutados por un grupo de Ángeles del Infierno y no se les ha vuelto a ver el pelo.
  • Los moteros estarán encantados de tener gente tan cañera dentro. Ahora mismo veo a mis chicos del pasado recorriendo las grandes praderas del Medio Oeste en sus satinadas motos, con el viento en la cara y sin miedo a los trompazos de los mamuts.   

 

(Capítulo 52 de Kaskarilleira Existencial. Aquí están sus otras historias)