Hola amigos:
Después de una larga espera en todo el orbe animal, podemos confirmar que pronto saldrá a la luz el secreto mejor guardado del Equipo de Diseño de Especies Naturales, (E.D.E.N.), es decir, la versión modernizada del actual homo sapiens.
Sí, la gran novedad de hoy se llama homo sapiens simplicissimus, el nombre que se le ha puesto a la primera actualización de la especie humana en miles de años. Y para hablarnos de esta exclusiva contamos en nuestros estudios con la presencia de Don Aciago Demiurgo, jefe de operaciones y nuevos lanzamientos de E.D.E.N.
- Díganos ¿ha merecido la pena tanta espera, señor Demiurgo?
- Por supuesto. Nuestro equipo tiene plena confianza en la nueva especie. Todas las pruebas que le hemos realizado a nuestro prototipo nos confirma en la excelencia de nuestro producto. Sin dudarlo, es nuestra mejor apuesta de futuro en el campo de los primates superiores.
- El homo sapiens ha sido bastante dañino para el resto de especies. ¿ocurrirá lo mismo con la nueva versión?
- En absoluto. El nuevo homo cuenta con una interfaz gráfica de lo más amigable. Además su capacidad de adaptación al entorno es óptima. Hemos mejorado su memoria de acceso aleatorio, es decir su RAM, y reducido su memoria sináptica permanente. Es cierto que su capacidad de almacenamiento es más reducida pero así no volverá a poner en peligro a todo el sistema operativo. Indudablemente el resto de los seres vivos se sentirán ahora más satisfechos y tranquilos.
- ¿Entonces el resto de especies tenemos garantizada nuestra seguridad? Se ha criticado mucho el exceso de libre albedrío del homo sapiens.
- Mire, hemos mejorado hasta tal punto los controladores y protocolos de seguridad, que cualquier modificación no prevista del entorno por parte del nuevo homínido, provocaría automáticamente el bloqueo de su desarrollo como especie.
- Un libre albedrío simplificado, menor capacidad de almacenamiento, una reducida memoria de larga duración. ¿Este homo sapiens simplicissimus parece peor preparado para sobrevivir en un mundo tan hostil como el que le ha dejado su antecesor?
- Muy al contrario, ahora será más consciente de sus limitaciones. Vivirá menos aferrado a su historia o a su cultura, pero más en contacto con el mundo que tiene delante de sus narices y del que hasta ahora apenas ha sabido disfrutar.
- ¿Pero será más tonto?
- Sí, de alguna manera, pero a cambio conseguirá más fácilmente lo que siempre ha buscado: la felicidad.
- Si su felicidad nos concede al resto de especies algo de paz, bienvenida sea.
Este homo sapiens simplicissimus será más tonto, pero más feliz. Esta idea trae a colación otra que emitió Flaubert hace unos cuantos "telediarios". Dice así: "Tres condiciones se precisan para ser feliz: ser imbécil, ser egoísta y gozar buena salud. Cuando falta esa primera condición todo está perdido".
ResponderEliminarPor esto yo nunca presumo de ser feliz...
Buenísima entrada, Dr. Krapp.
Doctor:
ResponderEliminarMuy bueno tu post del homo sapiens simplisimus, que será más tonto pero más feliz.
Pero yo me pregunto es que alguna vez ha sido listo el anterior homo sapiens??
Tan solo cito una breve g¡frase de Isaac Asimov que dice: "Solo hay una guerra que puede permitirse el ser humano la guerra contra su extinción."
Ahora me pregunto de que vale ser feliz si estamos condenados a no existir.
Besos
A veces la ignorancia tampoco da la felicidad
ResponderEliminarLo de la interfaz más amigable... me preocupa Doc, me preocupa.
ResponderEliminar;)
Espero que esto no sea premonitorio....
ResponderEliminarBueno, respecto a lo de "a más tonto, más feliz", no lo creo... O no quiero creerlo. De poder elegir, prefiero sufrir (total, ya no sería un sentimiento novedoso a estas alturas) y saber la razón de mi sufrimiento, y tener capacidad para solucionarlo, o para reconocer mi insuficiencia...
Prefiero saber
Un beso, Krapp
Haces bien Luis Antonio hay que desconfiar de aquellos que presumen ser felices, como hay que desconfiar de todos aquellos que sin más asumen sin más ideas absolutistas sin acogerse a las matizaciones.
ResponderEliminarLisebe la Constitución americana, que es una de las mejor escritas, habla de la búsqueda de la felicidad y no de que se pueda conseguir. No creo que la felicidad tenga ansias de permanencia en el tiempo, mas bien se conforma con entregarnos breves ramalazos de su brillo. Si la tuvieramos en toda su amplitud no podríamos soportarlo.
Bienvenido Danann. Si la ignorancia fuera síntoma de felicidad también lo sería el estar en estado comatoso o tener Alzheimer.
Espero que para bien, Fermín. Lo de la interfaz amigable es una frase de éxito en estos días.
Amiga Novicia ojalá saber la razón del sufrimiento aliviase el dolor de sentirlo y me inclino a pensar que reconocer nuestra impotencia para combatirlo tampoco lo conseguirá. Un beso también para ti.
Pues qué quereis que os diga, que yo estoy encantado. Un poco de ignorancia y más felicidad, de puta madre. No que voy con estos tornillos en la cabeza que me molestan tanto de tanta realidad como llevo dentro. Un poco más tonto y un poco más feliz. Por las fututras genraciones sin sabiduría y con felicidad!!!
ResponderEliminarA estos del EDEN habrá que vigilarlos de cerca, o no acercarse a ellos demasiado
ResponderEliminarTengo una pregunta para el sr. Demiurgo: ¿Cree usted que el homo sapiens estaba condenado por razones biológicas a convertirse en algo tan autodestructivo como el hombre moderno?
ResponderEliminarLo diré de otro modo: ¿Cree usted que el homo sapiens estaba condenado a vivir en sociedades condicionantes hasta el hastío?
PD. La imagen es sencillamente genial.
"No creo que la felicidad tenga ansias de permanencia en el tiempo, mas bien se conforma con entregarnos breves ramalazos de su brillo. Si la tuvieramos en toda su amplitud no podríamos soportarlo".
ResponderEliminarAcabo de caer en esa parte del comentario y me he visto en la obligación de opinar al respecto, o más bien dejar un par de preguntas en el aire: ¿No sería nuestra mente la única incapaz de soportarlo? ¿Acaso no sería genial poder desprenderse de ella?
Así me gusta Soportándome, las ideas bien claras y precisas: menos coco y más chin-chin.
ResponderEliminarDoctor Vitamorte, yo como usted huyo de los diseñadores naturales. A la menor ocasión te montan un pollo.
nsK aunque no está presente el señor Demiurgo para contestarle yo me permito la licencia de imaginar que le diría algo así como que todo está previsto sobre el papel, incluso nuestra vicisitudes, nuestro auge y nuestra fecha de caducidad.
Despojarnos de la mente para alcanzar la felicidad sería una excelente idea si no fuera que necesitaríamos de nuevo esa mente para constatar que somos felices.
No creo que necesitásemos constatar nada en esa hipotética pero factible situación.
ResponderEliminarEn algunas cosas sí me gusta ser ignorante, o al menos pretendo serlo... pero en general, me gusta saber más aunque no llegue a ser tan feliz. Al menos así creo que no me toman por tonta (creo... :-S)
ResponderEliminarSe me olvidó añadir que me ENCANTA la imagen. Es magnífica. Genial.
ResponderEliminarPues yo creo Nsk que cualquier estado necesita la consciencia para legitimarse y tomarse como tal.
ResponderEliminarGuinda yo creo que la curiosidad y el ansía de saber no está sujeta a nuestra capacidad de elección ya que es consustancial con nuestra naturaleza y además es tan adictiva que nos exige una constante expansión. Quizás esta adicción es uno de los principales motivos de nuestra infelicidad.
La imagen es de una revista alemana llamada Simplicissimus. En ella colaboraban grandes dibujantes y pintores europeos de finales del XIX y principios del XX.
Tal y como están las cosas ahora, creo que esa nueva versión creada hace años del homo sapiens simplicissimus ha sido tan prolífica que ha comido demasiado terreno a la anterior y los listos que la hicieron se están forrando a su costa.
ResponderEliminarQué ilusión me hace ver por aquí al Dr. Vitamorte. Fíjate, aquí yo todavía no existía.
¿Ser simples nos hace más felices? No lo sé. Vete tú a saber lo que es y dónde se encuentra la felicidad de cada uno.
Besos desde el más allá.
Lógico, vivimos tiempos de comodidad y simplificación. Todo debe ser asumible, fácil y ligero, no nos podemos permitir ninguna clase de estreñimiento vital. El medio modifica al hombre pero mejor ponérselo más cómodo.
ResponderEliminarNo pensar nos hace más felices y ya sabes que eso es una vieja idea que prevalece desde el Génesis y la tentación de la manzana.
Besos