26 diciembre 2019

Cuento sin maldad sobre los reales peligros de la bondad

Érase una vez un rey que empezó a gobernar en el reino donde se fabricaban los cuentos. El país se había vuelto rico y próspero. Las factorías reales, echaban humo a troche y moche por el día y por la noche, elaborando historias de todos los colores, formas y tamaños que eran adquiridas con entusiasmo en franquicias y tiendas especializadas de los más lejanos lugares. Además, magnates sibaritas de todo el orbe gastaban ingentes fortunas encargando historias a medida que ensalzasen sus verdaderos o ficticios logros.
Sin embargo el nuevo rey no era feliz. Había recibido una exquisita y esmerada educación de grave contenido ético y palabras como honestidad, rectitud o justicia no eran etiquetas de quita y pon en su laureada cabeza. Le asaltaban reales dudas
.

  • Vamos a ver -pensaba, cosa que era capaz de hacer sin la presencia del Ayuda de cámara- si los cuentos nos hablan de buenos y malos, de cómo los malos le hacen putadas a los buenos y de cómo al final triunfa la bondad, ¿no sería lógico que yo, rey justo y virtuoso, proceda a exterminar a los malos para facilitarle la vida a los buenos? Ahora bien, si hago eso ¿no peligraría el negocio de los cuentos que tantos dividendos proporciona al reino y que ha hecho que el populacho me considere todavía más justo, más grande y más noble de lo que realmente soy? Creo que debo pedir consejo a mi Consejo Real. 
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  • Majestad, si a Vuestra Excelencia le place acabar con los malvados, habrá que acabar con los malvados.
  • ¿Y no se resentirá nuestro negocio? En justicia no podemos fabricar cuentos con personajes maliciosos si nosotros hemos suprimido la maldad. Sería un engaño para los compradores- respondió el rey.
  • Como gustéis mejor, Majestad.
  •  Lo que me gustaría es que tuvierais opinión propia y no me dijerais sí a todo, carajo.
Como no podía ser de otra manera, prevaleció en el rey el sentido de la justicia y decretó el exterminio de todo bicho malo. En pocos días aquel tranquilo y próspero reino se convirtió en un lugar más siniestro que el cubil sangriento del ogro en plena temporada de caza. Hubo batidas tremebundas que acabaron con los lobos provocando un crecimiento nunca visto de la población de ovejas, cerditos y niñas con caperuza. Se les hizo lobotomías a los zorros para que no fueran tan astutos, lo que originó que quedaran a merced de las vengativas gallinas. Se prohibieron las madrastras por Real Orden lo que originó un aumento considerable de niños huérfanos. Se creó el Centro para la Rehabilitación de Príncipes Azules provocando que estos prefirieran seguir siendo sapos. Se quemaron en fastuosas hogueras, ya que habían huido en sus escobas, a las efigies de todas las brujas que sin poseer o renovar el carnet oficial para ejercer las artes mágicas, se dedicaran a comer a niños gorditos. Fueron envenenados varios miles de gatos negros y como resultado los ratones se comieron la cosecha de los graneros.
Era espantoso, cruel, una locura y las buenas gentes se echaban la mano izquierda a la cabeza mientras se rasgaban las vestiduras con la derecha.
Finalmente el rey justo se dio cuenta de que algo fallaba. Supo que sus súbditos empezaban a odiarle cuando surgieron los primeros tumultos y aparecieron en las calles pasquines con el dibujo de su silueta cubierta con una diana. Eso no fue todo, la Hacienda Real sufrió un grave quebranto cuando las manufacturas cuentiles, despojadas de malicia, se acumularon en los almacenes por falta de demanda. No entendía lo que pasaba y decidió consultar a un famoso sabio desnudo que vivía en un apartamento-tonel debajo mismo del balcón de su palacio.


  • ¿Qué esperabas, rey? - le contestó el sabio después de aplastar cuatro pulgas que se habían enseñoreado de su sobaco- Te has cargado a un montón de seres inocentes que llevaban la etiqueta de malos por tradición familiar. Ahora ya no hay malos, ni símbolos, ni tan siquiera metáforas de la maldad. Si no existe la maldad ¿tiene algún sentido la virtud? Y si la virtud tiene aún sentido deberíais empezar por ti mismo: en los cuentos se castiga a los reyes que hacen desgraciados a sus súbditos.
El rey asintió mientras una majestuosa lágrima se derramaba por sus reales mejillas. Por fin había comprendido la lección. Tenía que asumir su filosofía hasta el final. No tenía otra opción.
  • Sabio desnudo, has demostrado ser más justo y tener mayor sentido ético que yo, por eso es de ley que lleves mi corona. Tú dirigirás el reino y yo esconderé mi vergüenza en tu apartamento-tonel.
  • Quite de ahí, Majestad, yo no quiero esos honores.
  • Es lo correcto y lo correcto debe prevalecer sobre cualquier otra consideración. Si no lo aceptas serás ejecutado por atentar contra la Justicia Real.
El sabio dijo que sí porque a pesar de su cinismo amaba su escueto pellejo. Al hacerlo se convirtió en el primero de una fecunda dinastía que ha gobernado hasta nuestros días : la de los Reyes Desnudos.

Ya está. Este cuento se ha acabado. No me queda más que soltar vuestro esperado: colorín, colorado.

29 comments:

  1. Graciñas pola entrega.Os que non somos monárquicos sabemos interpretar.A seguir con esas boas aptitudes literarias.

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    1. Xa sabes que nos contos a paisaxe monárquica predomina sobre á republicana é hai que adaptarse as vellas modas.
      Grazas a ti, descoñecido coñecido.
      Feliz ano. Unha aperta

      Moite sorte no 2020.

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  2. No soy antimonárquico, al contrario. Fui cliente muchos años del Rey de la Gamba, en Barcelona, y siendo niño me despellejé ambas dos rodillas jugando en la Aceña do Rei Chiquito, cerca de Lugo. Hay multitud de ejemplos positivos más de monarquías, relacionadas con el jamón, las tartas de Mondoñedo, las camas de Lorenzo, etc.

    Dicho esto, el rey que hoy nos ocupa -el de tu cuento; el otro es con “k”- tiene muy buena voluntad, pero incurre en el mismo error que ya han cometido muchos antes y cometerán otros después: ¿quién decide quiénes son los malos?, ¿cuál es el baremo para medir la maldad o bondad?

    He leído un afortunado “tuit” (https://twitter.com/catacerca/status/645332658462027776) estos días –aunque es de 2015- que me ha aclarado al fin el asunto:

    -Maestro ¿cómo distinguir el Bien y el Mal?
    -El Mal da gustico.

    Saúde
    Gustoume o conto.

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    1. ¿Aceña do Rei Chiquito? Vaya mezcla de gallego y castellano.
      ¿Te das cuenta? La monarquía tiene caché por eso todos los cuentos son monárquicos y más cuando intentas remedar un cuento antiguo.
      Lo bueno de ser rey absoluto, es que puedes elegir por tu cuenta quienes son los malos sin tener que llevar una moción a cualquier parlamento y tener que negociar con otros grupos para alcanzar un consenso mayoritario.
      Lo del gusto por el mal se acoge a esas cosillas que uno piensa a veces pero que antes no se atrevía a escribir o decir en voz alta antes de la llegada de Twitter.
      Moitas grazas.
      Saúdos e Bo Ano.

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    2. Parece ser que, a principios del siglo pasado, compró el molino un indiano al que llamaban el Rey Chiquito. Por la zona el alcume se galleguizó sólo en parte.
      Era un paraje maravilloso, pero lo que a mí más me gustaba de niño era el perro Basset que tenían.

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  3. Pues muy bonito cuento navideño. Hay que conocer a las madrastras para apreciar luego a las madres.
    Felices fiestas

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    1. Muchas gracias, Chafardero. Sin duda uno aprecia mejor el café recién hecho si se ha acostumbrado al Nescafé.
      Felices Fiestas

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  4. El problema de este rey es que, aun teniendo casi todo, no recibió una educación para ser feliz...

    Un abrazo

    P.D. El cuento me ha encandilado

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    1. A veces la llamada educación en valores buscando la perfección se olvida de su objetivo primordial.
      Un abrazo y muchas gracias.
      Buen año

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  5. ¡Fantástico, doctor! La clásica estructura del cuento hace que se lea embobado en la forma; y asombrado con el fondo. Y es que más allá de quién es capaz de diferenciar el Bien del Mal, y sus consecuencias, lo verdaderamente profundo es entender que hay binomios inseparables que se necesitan unos a otros para alcanzar cada uno su plenitud. Sin la muerte no tiene sentido la vida, sin la tristeza ¿cómo distinguir la alegría? Sin el mal, cómo identificar el Bien... Un maravilloso relato para despedir el año. ¡Un maravilloso 2020 se le desea, doctor!

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    1. Pues si he conseguido combinar forma con fondo habré alcanzado mi objetivo con esta historia.
      El mundo es dual, tan siquiera no hace falta que nos lo diga la filosofía oriental, cada parte tiene sentido en función de la otra y a su vez cada una de esas partes llevan dentro su propia dualidad. La civilización humana y la propia naturaleza juega siempre a dobles.
      Muchas gracias, ya sabes como valoro tu opinión.
      También te deseo un 2020 lleno de hermosas historias, vividas y salidas de tu imaginación.

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  6. Lo bueno es que si el rey está desnudo no hace falta fingir que no lo está...

    Saludos,

    J.

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    1. La cuestión es saber si esos reyes eran conscientes del apelativo en su tiempo o fue asumido como tal cuando ya habían pasado.
      ¿Sabría Carlos II de España que le llamaban y le llamarían para la historia El Hechizado?
      Saludos

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    2. Seguro que Felipe "El hermoso" estaba orgulloso de su apodo. Si es que no fue él mismo quien lo puso a rodar.

      Saludos,

      J.

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    3. No estoy seguro, creo que los apodos son productos de la mitología popular o de las ganas de hacer la puñeta. Un ejemplo muy actual es el nombre que le han dado las gentes al nuevo alcalde de Madrid del Partido Popular: Carapolla y sí suena obsceno pero...
      Saludos

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  7. Si el rey está desnudo y no tapa sus verguenzas, se contradice con su filosofía comercial, en fin, me suena a lo que hace la oligarquía, está oculta aunque no desnuda, los súbditos no son tontos, al contrario. Los reyes de los cuentos son inofensivos hasta cierto punto pero desde mi punto de vista, opino que el mundo es dialéctico y que todo tiene un doble aspecto. Me encanta tu ingenio. Un abrazo, Krapp

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    1. Hola, Marisa. ¡cuanto tiempo!
      Digamos que el rey desnudo es el nuevo rey y que el anterior era el que tenía esa contradicción flagrante entre ideas y comercio, business y ética. El nuevo rey procediendo del lumpen quizás tenga ideas más cercanas a los ciudadanos comunes... o no. El poder tiene una gran capacidad para generar ensimismamiento "pecaminoso2 en quien lo posee.
      Gracias, Marisa.
      Un abrazo y Feliz Año

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  8. Este rey esta muy despistado, una vez que los malos no existen y para que justificar su existencia, que menos que recordar una y otra vez lo que hicieron en tiempos pasados. De esta manera el rey justifica su existencia, disfruta de la carroza real, de los banquetes y las asistencias con otros de su condición. Mientras el pueblo inactivo por no tener cuentos que hacer, de vez en cuando coge una limosna que deberá agradecer eternamente a ese rey magnánimo que se preocupa de su pueblo.

    Feliz Año Doctor, disculpe el retraso, he tenido muchos cuentos que hacer. Un saludo.

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    1. Era un rey moralista y algo ingenuo, quizás pensase que limpiado el mundo de maldad sería mejor tirar para delante y pensar que nunca existió no vaya a ser que al recordarlo algunos lo añorasen, ya sabes que con el tiempo todo se suaviza y puede parecer que el pasado ha sido mejor.
      los subditos cuando están desocupados tienden a pensar por su cuenta y pasa lo que pasa.
      Feliz Año, espero que tus cuentos y cuentas vayan bien. En el Día de Reyes todo es llevadero.
      Saludos

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    2. La maldad, como la bondad, no conoce bandos. Ambas son virtudes intrínsecas a las personas, por eso no hay pueblos bondadosos o pueblos malignos, hay personas malas y personas buenas en todos los sitios. opciones y comunidades.
      Un saludo

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    3. No hay pueblos buenos ni pueblos malos y hasta voy más lejos, en cada persona convive una pulsión hacia el bien y otra pulsión a saltarse la ética. La civilización es una forma de contención frente a las malas tentaciones de dejarse llevar.
      Saludos

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  9. Yo creo que el estado natural del ser humano es la insatisfacción. Nunca vamos a estar contentos con lo que tenemos porque las posibilidades ante nosotros son infinitas, no hay una vida igual a otra.En fin, yo lo que echo en falta en este cuento es una reina, una buena madrastra madrastrona, una bruja con escoba, pero claro este rey tan bueno se lo había cargado todo.
    Pues que ahí estamos en el medio del bien y del mal, bien "posicionaos" para el 2020
    Feliz Año, Dr. Krapp.

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    1. Sí, el estado natural es la insatisfacción porque le da sustancia a la vida. ¿Qué sentido tiene la vida si ya todo está conseguido?
      La verdad es que no pensé en connotaciones de género para realizar esta historia y además parece que no son tiempos para subrayar el lado oscuro de las mujeres, hay mucha susceptibilidad suelta.
      Feliz Año, Angie

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  10. Dicen los médicos que si no hubiese microbios ni bacterias malas el organismo no crearía autodefensas y luego cualquier catarro podría liquidarnos. O sea, que una cierta dosis de mal parece que siempre es necesario. Y es gran verdad eso de que "si no existe la maldad, ¿tiene algún sentido la virtud?". Aunque ya digo, el problema siempre está en la dosis.

    En fin: paciencia. Y suerte con el nuevo año....

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    1. Yo llevo con catarro hace casi un mes, no sé si he suprimido mis bacterias malas y estoy como el reino de mi cuento. Pues sí yo creo que las vacunas son buenas porque inoculan un tejido nocivo en la sociedad para que la gente no quede indefensa. Obviamente, Trump y toda esa panda de gobernantes, son intrínsecamente malos hasta que la sociedad reaccione y se libre de ellos.
      Mucha suerte también para ti.

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