- ¿Qué hace usted aquí, Modesto?
- Trabajando, señor director, como todos los días. ¿No querrá que
me quede en casa en tiempos de pandemia?
- Pero Modesto, usted ya no tiene trabajo.
- ¿Me manda al paro? ¿También me va a echar a mí después de regalarle a esta empresa 30 años de mi vida?
- No es eso, el problema es que...a ver como se lo digo. Usted no necesita trabajar porque...
- ¿Quiere que me acoja a un ERTE? Pues no será mucho con la miseria de sueldo que me paga. Prefiero seguir siendo ese "empleado veterano y competente que tanto ayuda a la empresa" como usted me dice. No es ningún premio volver a casa con esa paga y sin saber hacer otra cosa que currar.
- E...es que tampoco puede ir a su casa.
- Pues acláreme que va a ser de mi vida, ya que lo sabe mejor que yo.
- Mi buen Modesto, me veo en la penosa tarea de informarle de que el viernes pasado fue encontrado muerto en este despacho por la señora de la limpieza. Hacía dos horas que había acabado la jornada pero al parecer usted tenía algún asunto pendiente que resolver. Se levantó su cadáver con suma precaución por lo del Covid y se le llevó al tanatorio. Esta mañana se celebró el entierro. Justamente acabamos de venir de esa ceremonia y me he acercado hasta aquí porque vi luz debajo de la puerta.
- Vaya contrariedad. ¿Y qué voy a hacer ahora? No se me ha perdido nada en el cementerio. Me falta experiencia como difunto. Como le he comentado, solo se me da bien esto.
- A decir verdad, es una situación embarazosa. ¿Les gustaría seguir trabajando?
- ¿Cómo, aquí? Pero si estoy muerto...
- Solo lo sabría el equipo directivo. Eso sí, tendríamos que poner su despacho en un lugar más discreto. Quizás en el sótano.
- ¿Y qué tipo de gratificación recibiría por seguir empleado con ustedes?
- ¿Le parece poco contribuir al bienestar de la empresa sin tener que someterse a las habituales limitaciones a los que estamos sometidos los seres corpóreos?
- Eso es muy etéreo.
- Querido Modesto,
usted ya es etéreo y no necesita vulgares gratificaciones físicas. ¿Para qué
necesita el dinero si está muerto? No necesita comer, ni tener un
hogar. Tampoco necesita el coche, comprar una lavadora o pagar la
carrera de sus hijos. Por supuesto, se acabaron los planes de futuro porque su presente es ya su futuro.
Además viajar va a ser un chollo, ya que en un plis plas puede ir a
cualquier parte.
- ¿Usted cree?
- Eso es lo que he visto en esas películas sobre espectros y seres de ultratumba. Me parece que aquí los únicos beneficiados serán ustedes que no tendrán que soltar un euro.
- Modesto, por favor, le ofrezco algo mucho mejor que las caducas
recompensas físicas. Le ofrezco ser útil. Un difunto útil a la sociedad que no perderá
el tiempo arrastrando cadenas, recordando pasados
agravios y asustando a los vivos. Una ocasión de primera para un difunto novato.
Sección Femenina
Hace 7 horas
Excelente relato, muy divertido, son esas situaciones imposibles como de La Dimension Desconocida, my actual a la pandemia
ResponderEliminarGracias, Hugo, me alegra la comparación con la Dimensión Desconocida. La pandemia estás demostrando lo cortos que se habían quedado muchos relatos.
EliminarHola Krapp,
ResponderEliminarComo yo lo veo, las relaciones de producción continúan aun despues de muerto y la abnegación hacia la empresa, con precariedad incluida pero ésta vez la empresa no tiene necesidad de la plusvalia de Modesto, éste trabajá sustituyendo las cadenas de un penado difunto por un trabajo sin ninguna retribución. Explotación laboral más allá de la muerte, muy ingenioso, me ha gustado mucho el lado macabro surrealista del asunto. Un fuerte abrazo y un relato muy original.
Creo, Marisa, que lo de Modesto más parece una minusvalía bien aprovechada por su patrón. Te recomiendo, si no lo has hecho ya, ese maravilloso relato de Melville titulado "Bartleby, el escribiente". Creo que era es toque macabro lo que quería subrayar con esta historia.
EliminarMuchas gracias, un abrazo grande
Ja, ja, ja... Desde luego que en esta relación laboral no vale aquello de "Hasta que la muerte nos separe". Divertidísimo relato con el amargo trasfondo de que a este paso ni siquiera hará falta estar muerto para trabajar sin cobrar. Un fuerte abrazo, doctor!!
ResponderEliminarUn trasfondo decididamente tenebroso porque si los robots no están a tiempo o cuestan mucho, quizás haya que plantear algo de vudú y hacer como en Haití con los zombis. Por cierto es curios, como en las narraciones del Caribe la prolongación de la esclavitud es trabajar con muertos revividos.
EliminarUn abrazo, David.
Vaya difunto más ingrato con la buena consideración que le tienen en su empresa...
ResponderEliminarUn abrazo
Me has hecho recordar aquella canción de la postguerra siempre tan actual.
EliminarEsta, claro.
Un abrazo
ESto de los difuntos útiles siempre ha servido. Desde tiempos pretéritos a estos pobres "no existentes" se les ha alzado a los altares o se les ha condenado al infierno en función de intereses de los vivos o de los vivillos, (ahí ya no se bien).
ResponderEliminarDe hecho no ha sido pocos los que han contribuido más a determinadas empresas muertos que vivos, para bien o para mal, para adorarles o para odiarles a gusto del consumidor y de la época.
Un salido.. digo un saludo.
Fíjate, el propio Cid, tu paisano, fue usado como elemento propagandístico por los cristianos tras su muerte, cuando la conquista de Valencia, aunque me inclino de que hay mucha leyenda.
EliminarSaludos
Pues no sé si la historia es una parodia de los abusos laborales perpetrados por nuestra amada patronal o una descripción del infierno. La eternidad entera resolviendo expedientes, lo de Dante en comparación era un balneario.
ResponderEliminarMis parodias, cuando lo son, a veces van de una cosa y a veces de otra y quizás una cosa lleve a la otra. En lo de Dante como era casi un parque temático del dolor podías escoger entre enormes castigos, al menos en el Infierno.
EliminarUn retrato acertado y realista de la vida laboral en estos tiempos...
ResponderEliminarMuchas gracias, Pedro, espero que solo sea por ahora y que la cosa cambie, aunque tengo mis dudas.
EliminarUna metáfora de lo que es dejar la vida en un trabajo y luego no saber qué más hacer con ella. Muy bueno!
ResponderEliminarEsa también era la idea, esa gente que pasa del todo a la nada y se estrella por el camino. En este caso con una solución escatológica.
EliminarGracias, Mirna
Sí, esa frase de "... sin saber hacer otra cosa que currar" me temo que es sintomática entre un amplio sector de currantes: han entregado su vida al curro hasta tal extremo que en algún momento perdieron la conciencia de ser algo más que simple mano de obra.
ResponderEliminarY los jefes, que lo saben, se aprovechan: tal para cual. inventarse la ideología de que "lo que es bueno para la empresa es bueno para ti" fue uno de los grandes triunfos del capitalismo industrial.
Sí, estoy de acuerdo, pero creo que hoy en día cuando ya no hay trabajo para toda la vida y vivimos en la precariedad laboral ya no hay esa clase de fidelidades. Creo que en Japón donde la gente heredaba puestos de trabajo de padres a hijos se generaron muchos suicidios por esa cuestión.
EliminarLa empresa como familia es un concepto que se quiere seguir utilizando pero ya no es tan exitosa, incluso en Mercadona o en Inditex.
¿Relato original? ¡De ninguna manera!
ResponderEliminarUsted ha plagiado vilmente la situación de nuestro amantísimo Generalísimo, quien, pese a su infausta muerte, continúa dando por cul... trabajando por el bien dEjpañia. Cada día está más ¡Presente!
Y, con respecto a Man(n), SEGUNDO AVISO.
Moita saúde, prosma botaporela.
Y para eso se dejó a su retoño, el Rey Juan "Cazador de Elefantes dopados y desfalcador del Estado Español" Carlos I.
EliminarSaludos,
J.
Refuto ese argumento, donde manda patrón no manda marinero y mi difunto es un pringado de tomo y lomo comparado con el Generalísimo.
EliminarLo de Mann me desconcierta algo
Moitas grazas, saúde
Un retoño vividor y chapuzas, por cierto y no me vale el argumento de que una vez fue bueno. La maldad presente no se palía con la bondad pasada.
EliminarClaramente todo héroe vive lo suficiente para volverse villano. Y cada villano se hace millonario. Y cada millonario más millonario que antes.
EliminarY ninguno es Batman.
O algo así.
Para mí que lo de Batman era una fortuna en parte heredada, como la de Trump aunque esté tiene más morro que dólares, y lo del Emérito es porque era párticipe de una cadena de favores. Un intermediado coronado.
EliminarQuien no quisiera resultar útil de alguna manera, aunque más no sea muerto.
ResponderEliminarSaludos!
J.
A mí los excesos del utilitarismo no me acaban de convencer personalmente sobre todo en la dimensión desconocida.
EliminarSaludos
Siempre se puede servir de decorado para la vida de alguien más...
EliminarLos zombies dan mucho juego porque nos vemos reflejados en ellos cuando actuamos como masa descerebrada, como contó Romero en 'La noche de los muertos vivientes'. Pero tu texto tiene además una vena kafkiana. El señor Modesto despierta un día, en su oficina, convertido en un monstruoso cadáver, mientras el mundo sigue girando.
ResponderEliminarComo dicen Mirna o Pedro, hay mucha gente que solo vive para su trabajo. Y como dice Rick, esto supone un triunfo de esa mentalidad del capitalismo contemporáneo que cifra la realización del empleado en el éxito de su empresa. Yo me quedo con esta lectura.
Aunque tu texto tiene muchas lecturas posibles. Desde nuestro contexto más cercano, hoy habría quien pensaría en el toque de queda, señalando las posibles contradicciones en las medidas sanitarias, ya sabes: ''¿en los bares nos contagiamos pero en el trabajo no? ¿Nos hacen vivir solo para trabajar?'' Con ello se finge olvidar el objetivo de las medidas, así como el dilema entre el problema sanitario y el económico. Desde luego, tanto al gobierno central como a los autonómicos se les pueden hacer muchas críticas por su gestión, y siempre es buena la postura crítica, pero me llama la atención que algunos carguen las tintas en esa en concreto. No es lo mismo quejarse por no poder acceder a unos servicios o tomar unas cañas de madrugada que quejarse por perder el trabajo o por no tener un servicio sanitario a la altura de las circunstancias. Perdona por la digresión, Doctor, no he querido sonar tan serio.
Sí creo que Kafka es un buen referente, ya que el lo que nos hablaba era de la deshumanización contemporánea a través de diferentes situaciones, desde el poder coactivo del Estado, la familia, los vecinos, el trabajo, la justicia. El individuo enfrentado al gran aparato que lo somete y aplasta sin remedio. Fue un gran distópico antes que Huxley, Pierre Boulle o Orwell.
EliminarRespecto a lo de la pandemia la sacralización del trabajo no debería llevar a la conclusión de que es lo único importante, que el ocio es parte fundamental en nuestras vidas y que la gente que ha convertido el ocio de los demás en profesión debe recibir la debida consideración y apoyo.
Las cañas se pueden tomar a cualquier hora pero su necesidad puede ser permanente o lo que ellas representan.
Buena digresión. Saludos
Que pesadilla: morir en el trabajo y acabar yendo a trabajar de nuevo incorpóreo. Oye, y el empresario que listo ¿no? trabajar sin cobrar, el sueño de todo empresario al que poco a poco nos vamos acercando.
ResponderEliminarSaludos!!
Hay gente capaz de morir trabajando y trabajando ir muriendo. Es cierto que para muchos la familia no es refugio y prefieren la compañía de los demás o incluso de una actividad que los justifique.
EliminarEl empresario, cualquier empresario de éxito, sabe sacar partida de las carencias.
Saludos
No des ideas. Veras como alguno no.lo ve ni mal.
ResponderEliminarPor el Caribe lo emplean a menudo con el vudú.
EliminarQue divertidos los comentarios
ResponderEliminarUna entrada muy bien escrita doctorcito
Un abrazo desde la lluvia que me moja
y me pone mas mojada. Hace tres dias que no deja de llover escritor
Muchas gracias, Mucha. La lluvia que moja es deseable a aquella que quiere ser y no acaba siendo. Lo malo son los temporales con nombre.
EliminarEste comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarHay mucho Modesto suelto. Lo que me he reído! Genial el post, como siempre.
ResponderEliminarMucho Modesto que confunde modestia con mansedumbre y siempre algún pastor que aprovecha su lana.
ResponderEliminarMuchísimas gracias, Estefanía
Buenísimo!!!
ResponderEliminarMuchas gracias, Cris.
EliminarEstos derechos que se atribuyen en momentos de crisis o confusión estos buenos samaritanos...
ResponderEliminarA ver si Modesto como difunto novato le saca más de sus casillas a este listo.
Un abrazo feliz finde
Es fácil ser samaritano cuando te quitan las castañas del fuego y te hace seguir ganando.
EliminarUn abrazo y feliz finde