26 enero 2010

Cuando el abuelo se rebela


  • ¿Te has hecho daño?
  • No, llegué bien. Creo que estando tú arriba y yo abajo podemos hablar con mas confianza y sin que me intimide tu físico pulido y tu voz cavernosa, papi.
  • No me llames papi, hasta hace un minuto estábamos luchando por aniquilar al otro y salvar el propio pellejo. ¿Has decidido lo que vas a hacer u optas por una solución edípica?
  • Odio a Freud, mejor me uno a ti y abandono mis pretensiones heroicas. Después de todo el lado tenebroso tiene una moral menos exigente y dogmática. Solo una condición: en compensación por el abandono en que me has tenido hasta ahora, cuando tenga hijos quiero que te encargues de ellos. Es decir, que los lleves a la guardería espacial, te quedes con ellos cuando los sábados vaya a cenar a algún planeta de moda o cuando tenga que asistir durante una semana a la Convención  Anual de Jedis Renegados
  • ¿Algo más?
  • Hombre, ahora que lo dices, podrías atenderlos también mientras esté despachando los asuntos corrientes del imperio.
  • Te equivocas, mi propuesta es compartir el mando. Además todavía ni te has casado y no hay perspectiva de que tengas herederos. En los mentideros de la corte imperial incluso se dice  que el joven Skywalker puede ser gay.
  • No soy gay y mi obligación es mantener la hegemonía familiar durante los próximos siglos. Sin embargo es un hecho que tú te harás mayor y que el Reverso Tenebroso no te protegerá de la inevitable decrepitud. Serás anciano y como tal, deberás cuidar de tus nietos como un abuelo moderno. Estoy seguro de que el cuidado de tus nietos te redimirá de tus muchas fechorías, Papá Anakín.
  • ¿Pretendes que me convierte en uno de esos viejos reblandecidos y frágiles esclavizados a un montón de niñatos malcriados por la increíble condescendencia de sus padres? ¿Acaso quieres convertir al espeluznante Darth Vader  en el babero de tus hijos?
  • Encontrarás múltiples emociones limpiándoles las caquitas, contándoles alguna de tus historias tremebundas o dejando que jueguen, criaturas, con tu  oscuro yelmo. 
  • Mi yelmo me da la vida y pretendes que la pierda a manos de de unos chiquillos mocosos y consentidos mientras aún puedo dar guerra. Claro, de esa manera, en el momento en que empiece a chochear, no te costará nada expedirme como chatarra espacial a algún lejano planeta basurero  
  • Lamento que no aceptes tus obligaciones.
  • ¿Mi obligación? Tus hijos son tuyos, no míos. ¡Qué te los cuide algún robot nodriza! A vosotros los jóvenes os confunde la ambición  y pretendéis libraros de todo lo que pueda perturbarla. Sois unos insensatos abandonando a vuestros hijos en manos de vuestros ancianos padres que lo único que aspiran a un poco de paz después de una vida de ajetreo.
  • Tú también me abandonaste y te mereces tu castigo.
  • Optas entonces por la solución edípica. Como quieras, joven  Skywalker
    Voy a por ti.
    Recuerda que aunque la fuerza está contigo todavía no eres un jedi.
    Estás derrotado.
    Resistir es inútil...

26 comments:

  1. El tema de los abuelos esclavos, es ya una realidad en las sociedades avanzadas. Simplemente porque los abuelos tienen lo único que los jóvenes envidian: Tiempo y dinero. El tiempo, por supuesto, siempre es relativo, ya que sabemos que hay una señora muy ocupada por ahí, que no se olvida de nadie, y tal vez se vaya llevando algún abuelito esclavo de vez en cuando.

    También el dinero es relativo, pero la hornada de abuelos de hoy (no los futuros) son muy austeros y ahorradores, por lo tanto les sobra para vivir.

    Los hijos quieren tenerlo todo. Y de momento sólo tienen juventud (relativa también), pero les falta tiempo y dinero para satisfacer estos niveles de vida que todo el mundo se autoimpuesto bajo el lema tontolaba ¡para eso trabajamos! Trabajan para gastar, no para vivir ni para disfrutar, porque no se puede disfrutar con falta de tiempo.

    Por lo tanto, los retoños, obligada continuidad si alguien quiere dar sentido a una vida, no pueden recibir toda la dedicación paterna y se suple con la de los abuelos.

    Todo eso me lleva a rescatar la famosa frase del Principito, -ya que he llegado a la conclusión que los únicos sabios reales, que no cultos, sino sabios de verdad, son los personajes de la literatura- cuando se encuentra con el comerciante que vende pastillas para apagar la sed y ahorra los minutos perdidos en beber (unos 53 minutos por semana):

    "Si tuviera cincuenta y tres minutos para gastar, se dijo el Principito, yo pasearía tranquilamente hacia una fuente…"

    P.D. Los nombres de los personajes de la guerra de las galaxias, apenas los recuerdo, para mí es una película absolutamente insoportable, pese a su intención supuestamente moralizadora.

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  2. No me extraña que se rebele el pobre Darth, normal, ve lo que se le viene encima. Y es que a la tercera edad en estos tiempos no se la valora como merece, relegándola a mero mueble o como mucho a niñera de entresemana. Y para alguien que merendaba planetas con la Estrella de la Muerte, pues claro, darle ahora la merienda de potito al nieto como que no.

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  3. Los padres que no puedan asumir la responsabilidad que entraña tener hijos, mejor que no los tengan.

    Con los abuelos se debe contar, por qué no, si ellos voluntariamente quieren colaborar en el cuidado de los nietos y, por supuesto, en casos de fuerza mayor, pero en modo alguno se les ha de hacer responsables de una función que compete a los padres.

    Conozco a muchos abuelos esclavos a los que falta valor para hacerse respetar en sus limitaciones para asumir tamañas responsabilidades.

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  4. No estoy de acuerdo, Luis Antonio, si para tomar las decisiones tuviésemos de valorar responsablemente las consecuencias de las mismas, nunca las tomaríamos... así nos luce el pelo, cada vez hay menos hijos.

    Eso no quiere decir que no haya que asumir las consecuencias de nuestros actos. Es cierto que la moral social actual (no la de nuestros padres) ha fomentado la irresponsabilidad.

    Pero vivir la vida supone precisamente eso, asumir responsablemente las consecuencias de lo que hacemos, tanto si lo hemos reflexionado antes como si no.

    Aunque conozco más de un abuelo que está encantado con que de vez en cuando le dejen a sus nietos.

    Me encanta la frase del Principito (gracias Atalaya). Efectivamente, los padres que evaden la compañia de sus hijos "por falta de tiempo" no saben lo que se pierden: una de las cosas más maravillosas de la vida, ver crecer y evolucionar a la progenie.

    Los hijos no son una obligación, son un gozo.

    Yo siempre digo que tanto aprenden ellos de tí como tú de ellos.

    Y mientras pueda seguir aprendiendo, merecerá la pena seguir viviendo.

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  5. Estoy totalmente de acuerdo con tu comentario, Atalaya. Los abuelos tienen tiempo y dinero aunque yo añadiría otra cosa: una incapacidad moral de decir que no a los caprichos de sus hijos. Esa maldita culpabilidad que todo los trastorna en esta sociedad. Los padres no saben decir que no a la presencia de los hijos en el hogar familiar hasta edades inconvenientes para el propio desarrollo personal y cuando por fin logran desembarazarse de ellos éstos les traen un nuevo paquete en forma de nietos. No digo que los abuelos no puedan ayudar en la educación de los nietos, está por ejemplo el caso de los emigrantes que dejan a sus hijos con sus propios padres, pero cuando es no por necesidad si no por motivos mas espúreos la cosa clama al cielo. Una sociedad que no respeta a los mayores se merece todas sus lacras.

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  6. Bien dicho, Efter y no hay que ser Darth Vader para darse cuenta de los efectos humillantes de que solo te valoren como una niñera barata a la que tan siquiera se le permite tomar iniciativas propias ya que corres el riesgo de que los padres, tus hijos, te echen en cara que quieres competir con ellos en la educación de sus cachorros.

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  7. El tema de las responsabilidades es complejo, Luis Antonio, ya que implica una visión de futuro que no todo el mundo tiene o quiere tener. Asumir previamente eso, tal como dice, Rrío, te puede llevar hacia el inmovilismo.
    El problema es que la dejación de responsabilidades va acompañado por la obligatoriedad que se le pide a los abuelos a los que sí les acusa de irresponsables si se niegan a cuidar a sus nietos. El chantaje emocional es el componente esencial en todas las ensaladas de poder en el seno familiar.

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  8. Quizás enfocamos desde el territorio de la irresponsabilidad lo que simplemente podríamos llamar desidia, Rrío. Hay demasiadas cosas alrededor que distraen nuestra atención hasta el punto de difuminar con sus deslumbrantes colores las cosas que merecen la pena. Una de ellas es, no te quepaduda, las relaciones paterno-filiales.

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  9. Al respecto de lo que ha dicho Luis Antonio:

    Antropológicamente, el hombre es un animal gregario.
    Desde el principio de los tiempos ha vivido en familias y clanes. Todos han cuidado unos de otros, y principalmente de los cachorros.

    Mis padres se quedaban encantados al cuidado de mi hijo, al que adoran, mientras yo estaba en el trabajo (lo recogían del cole y le daban de comer). Fueron ellos quienes se ofrecieron antes que contratar a nadie o de que el niño tuviese que ir a una guardería.

    He de decir que nunca, les dejé de canguros para salir de juerga.

    Un saludo.

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  10. Más de un yayo querría un yelmo protector como el de Darth Vader para salir de esa esclavitud.
    Creo que es fundamental ser responsable de lo tuyo. De todo.
    En mi caso he tenido mucha suerte y los abuelos han colaborado desde el principio por iniciativa propia (Les parecía que al acabar la baja maternal, con 4 mesecitos, los críos eran demasiado pequeños para dejarles en la guarde 9 horas pudiendo hacerse cargo ellos). Y a nosotros nos pareció fenomenal. Después, cuando han estado o están malos, cuando no hay clase, etc, etc, he seguido llevándolos donde los abuelos, aunque si es un día solamente y coinciden los dos, ya les dejo en casa solos.
    Mi hija, con 18 años y en la universidad, sigue yendo a comer donde mis padres casi cada día, porque dice que su abuela cocina como nadie y la abuela encantada porque así se asegura de que la niña come bien....
    Pero en escasísimas ocasiones, y casi casi obligados por ellos ("para que salgais algo, joer") les hemos dejado un fin de semana o cualquier otro día para irnos de jarana.... Es ahora, que ya les podemos dejar solos en casa, cuando empezamos a salir por ahí nosotros...

    Es cuestión de responsabilidad, creo yo.

    Un beso, Krapps

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  11. Yo no hablo de los abuelos que aceptan de buen grado la convivencia con sus nietos, es más hay que favorecerla ya que estimula la comunicación entre generaciones. La presencia de los abuelos siempre han sido fundamental en esos clanes y en las estirpes familiares de los que hablas, Tesa. El problema es que en la actualidad se producen casos donde los abuelos "obligatoriamente" deben hacerse cargo de sus nietos dejando otras deseos, otras actividades, otros disfrutes, otras libertades para mejor ocasión. Conozco abuelos que se sienten atados, esclavizados como dice Luis Antonio a algo que no han elegido y no porque no quieran a sus nietos si no simplemente por su necesidad de tener un espacio para ellos mismos.
    Un saludo

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  12. Esa es la palabra, Novicia: que las cosas sean por iniciativa propia y no por imposición ajena. Cuando hay mútuo encantamiento -como dices- no hay problemas. En cambio, cuando las cosas son obligadas, cuando es una forma de "imposición" al mismo tiempo que de "estacionamiento barato" de los hijos es cuando surge todo ésto que comento.
    Un beso.

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  13. Yo no tuve esa suerte o desgracia que a mi hijo lo cuidaran los abuelos.

    Un beso multicolor y feliz fin de semana

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  14. Pudo haber sido mejor, pudo haber sido peor.
    Un beso, Iris.

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  15. Dos apuntes:
    Primero. El pobre Darth Vader va de duro pero lo tiene clarinete, le tocará pringar de cualquiera de las maneras, se ponga como se ponga.
    Segundo. Como dice Tesa, la familia, la tribu, es el origen de nuestra sociedad, pero para el desarrollo de la revolución industrial y la expansión económica hacia un mundo-mercado no era conveniente. Se necesitaban y se necesitan individuos consumidores, no unidades familiares amplias que puedan compartir. Compartir es gastar menos, algo intolerable en nuestro mundo actual. Pero las costuras sociales chirrían porque no se puede estar en misa y repicando y se solapan las funciones, los abuelos hacen de padres, los padres hacen de eternos adolescentes y alos niños se les hace crecer a golpe de impacto mediático.
    Afortunadamente, el gobierno de ZP viene en ayuda de los abuelos y retrasa la edad de jubilación para romper la esclavitud familiar y prolongar la laboral, con lo que los padres podrán dedicar más tiempo a sus hijos y estos serán más equilibrados y futuras buenas personas al haber podido contar con el cariño fraterno que hasta ahora se les escatimaba.
    Y todo esto Zp sin despeinarse.
    ¡Si es que tenemos un gobierno que no nos lo merecemos!

    Saludos.

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  16. Cuando la situación no es impuesta los abuelos transmiten un cariño diferente y complementario al que aportan los padres.
    No se puede imponer responsabilidades de ese calado a los demás, muchas situaciones no admitirían ni planteamiento. Recuerdo a una pareja que tenía dos hijos pequeños (de unos 3 y 6 años, eran dos tortugas ninja muy activas, con la espada en danza todo el día)y quedaban todos los días, durante todo el día, al cuidado de los abuelos, ya mayores. Un día apareció la madre diciendo que habían pensado tener un tercer hijo y que sus padres se habían negado rotundamente y afirmaba que a ella sus padres no iban a decirle cuántos hijos tenía que tener. Algunos hijos no se merecen los padres que tienen.

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  17. Me ha hecho reír a mares con el diálogo, Dr... un aplauso para Darth...por necesidad, mis padres, y sobre todo mi madre, me han ayudado con el cuidado de mis hijas; esto siempre me preocupó mucho, porque ambos son (era, mi padre) muy vitales y tenían ocupaciones propias ( mi padre trabajó casi hasta el momento de morir). Pero la vida a veces te da hermosas oportunidades para, de alguna manera, poder rearmar ciertos espacios, o "devolver" ciertos lazos que estaban medio perdidos, y pude hacerlo gracias al mismo trabajo que les había "sacado" a mis padres su tiempo por cuidar a mis niñas;solo hay que saber aprovechar la oportunidad; les cuento porque me parece que vale la pena; mi padre no tenía mucho contacto con sus hermanos, pero hace unos dos tíos y mi primo comenzaron a tomar clases de canto conmigo, lo cual significó que luego de cada clase volviéramos todos juntos a cenar con mis padres y mis hijas, lo que le devolvió a mi papá uncontacto muy deseado; hoy, después de su fallecimiento, mis parientes siguen viniendo a cenar con mi madre después de clases. Y otra más: mi madre canta por voluntad propia en el coro que dirijo, es una de mis mejores sopranos...

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  18. Creía que habías mejorado del blog, pero veo que no.

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  19. ¡Qué bien has entendido la especial clarividencia de nuestro presidente, Enric!

    Deberíamos estar agradecidos a su sentido común y a su visión de futuro. Estoy seguro de que si la cosa económica está tan mal es porque prefiere que nos paremos y que incluso vayamos hacia atrás, para coger impulso y luego permitirnos realizar un salto tan grande que dejará asombrados a todos esos memos de las instancias económicas internacionales que nos pronostican un futuro nada halagüeño.
    Es tan gran presidente que no nos lo merecemos, debería gobernar en otro país. ¿Por qué no se va a gobernar a otro país que sea digno de su sapiencia?

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  20. Angie, siempre deberían poder ofrecer esa visión personal pero hoy por hoy se la juegan, ya que entran en inmediata competencia con los hijos que en muchos casos ni educan ni dejan educar. Esperpentos lamentables como el que comentas son extremadamente habituales, lamentablemente.

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  21. El caso que cuentas, Myriam es realmente aleccionador ya que muchas veces los nietos, los niños en resumen, sirven para estrechar lazos perdidos o desatados en el pasado. Lo bueno, como en tu propio caso, es que se haga desde la libre voluntad respetando las ocupaciones y la vida de cada cual.
    Sin embargo hay gente que considera que llega el momento en que los padres no tienen nada que hacer o que es menos importante lo que están haciendo que lo propio y de ahí derivan todos estos males que comentamos.

    Angie, no te entiendo.

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  22. ¡Joder! y yo con estos pelos...
    Taspasao!!! jajaja!

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  23. Sencillamente genial, mi estimado amigo Krapp. Se espera la secuela de Star Wars para el 2016 con mucha expectativa. Todos los niños de mi familia están al tanto. Les pasaré el vídeo que le has colgado a esta entrada para divertirlos. Muchas gracias por referirme a este texto tuyo. Es siempre un placer leerte.

    Muchos besos.

    Fer

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    1. Muchas gracias, Fer. Escribí ésto en el 2010 y ahora veo las cosas más cercanas porque veo más cerca mi propia decrepitud.
      A ver que nos trae de nuevo tan famosa saga y sobre todo que podamos verla..
      Un fuerte abrazo

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